Es clave que el bebé diferencie el día de la noche para que pueda tener un buen desarrollo a lo largo de su vida. Nuestros ritmos son circadianos (de 24 horas) y se tienen que ajustar a los ritmos geofísicos del entorno.
- Dormir es algo positivo, no negativo. Hay que transmitirle que dormir es algo bueno. No puedes castigar al bebé con irse a dormir cuando hace algo malo, ya que estarás condicionando el sueño como algo negativo. Hay que enseñarles que dormir es algo positivo y fundamental.
- La noche está para descansar. La casa tiene que estar en silencio y con poca luz. Si se pone a llorar en plena noche sólo levántate si ves que no puede calmarse e intenta tranquilizarlo. Es malo dar el pecho en estas ocasiones porque se puede acostumbrar a tomarlo para dormir y no poder hacerlo sin él.
- Aprender a dormir solo. Un truco para que se acostumbre a esto es llevarle a dormir pronto, cuando todavía está algo despierto, y dejarle allí hasta que se duerma.
- Cenar tarde. Esto es otro hábito que le ayudará a conciliar el sueño.
- Sin siestas tardías. Entre su última siesta y la hora de dormir tienen que pasar mínimo cuatro horas. Necesita estar cansado para dormir.