¿Habéis decidido que vais a tener un bebé? Ante todo priman dos cosas muy relacionadas entre sí: adiós mala vida, hola vida sana. Todos los consejos que vienen a continuación no hay que seguirlos a rajatabla, pero conviene tenerlos en cuenta.
Vamos a empezar con ellas. Nos podemos despedir de: trasnochar, alcohol, fumar y drogas. Controlar la sal, el café, el te y el azúcar. Cuidar la alimentación: ni sobrepeso ni extrema delgadez son buenas.
En cuanto a ellos: el alcohol no aumenta la libido, sólo debilita el semen y da problemas de erección. Aquí la dieta también es fundamental, la obesidad es una gran causa de infertilidad. Una dieta de productos naturales mejora la movilidad de los espermatozoides hasta en un 50%. No uséis prendas muy ajustadas («marcando paquete») o estéis sentados demasiado tiempo, ya que aumenta la temperatura de vuestros genitales y es perjudicial para el esperma.
El estrés es el enemigo público número uno, tanto para los ciclos menstruales de ella como para los espermatozoides de él. Intentemos no entrar en el círculo vicioso: no se queda embarazada y me estreso, entonces al estresarme bajan las probabilidades de que se quede…
En cuanto al cuándo y cómo tener las relaciones, lo óptimo es dos o tres veces por semana en periodo fértil, así nos aseguramos calidad y cantidad en los espermatozoides. La postura no es muy determinante, pero parece que la clásica postura de «el misionero» es la más efectiva.