El ser padres implica incluir en nuestro vocabulario un montón de palabras nuevas. Una de las que escucharemos al pediatra más habitualmente es la de «percentil».
El percentil de un bebé o un niño es un dato que se obtiene de la comparación de la talla, peso o perímetro craneal de un bebé y que mediante una tabla (basada en los parámetros de la OMS -Organización Mundial de la Salud-) se compara con los datos de otros niños de su edad. Existen tablas para niños y para niñas, ya que los parámetros de crecimiento para ambos sexos son diferentes.
Es una medida muy común basada en datos estadísticos y que ayudan a detectar desviaciones en el desarrollo del niño. Los que más preocupan a los padres son los de talla y peso de los bebés pero un consejo: no obsesionarse con esta tabla, escucha siempre a tu pediatra. Cada niño tiene una constitución y un niño con percentil bajo no es símbolo de mala salud, ni mucho menos.
¿Cómo interpretar los datos?
Si el pediatra nos dice que nuestro bebé está en el percentil 25 altura que de cada 100 niños de su edad, 75 son más altos que nuestro hijo y 24 serían más bajos. Sin embargo, si nuestro hijo está en el percentil 90 de altura significa que, de cada 100 bebés, sólo hay 10 que midan más que nuestro niño, por lo que habría 89 que medirían menos. Evidentemente, el percentil 50 es la media .
Podéis encontrar estas tablas en la tarjeta sanitaria de vuestro hijo.