Sabemos que nuestros bebés son más propensos a contagiarse por los virus y las bacterias, ya que todavía entre sus dos y cuatro años, su sistema inmune sigue siendo poco maduro, y tienden a ponerse malos muchas más veces que un adulto. Sus anticuerpos todavía están generándose, y los agentes externos pueden aprovecharse de ello.… Seguir leyendo Reforzando las defensas