Ya se acerca la fecha del parto, pero no tienes muy claro cuáles son las señales que te harán saber que efectivamente ha llegado el momento de dar a luz. No te preocupes, en eso podemos ayudarte: Has de saber que la mayoría de las mujeres dar a luz entre las semanas 38 y 42 de la gestación, semanas en las que se considera que el embarazo ha llegado a término. Pero es difícil saber el momento exacto del inicio del parto… La fecha posible del parto no es más que una idea aproximada cuyo cálculo se basa en una cuenta de cuarenta semanas desde el primer día de la última menstruación. No es raro que el parto se inicie unos días o incluso unas semanas antes o después de la fecha prevista.
El parto se desencadena debido a determinados cambios hormonales y endocrinos que surgen de una parte del sistema nervioso central del bebé y de la madre, denominada hipotálamo, los que desencadenan el parto. También las situaciones de estrés o las lesiones cerebrales de otras zonas del sistema nervioso pueden provocarlo.
La aparición de contracciones cada vez más intensas y a intervalos regulares indica que ha comenzado la dilatación. Son una señal inequívoca de que se ha iniciado el parto.
Al contraerse el útero, se produce un endurecimiento del abdomen que suele ir acompañado de dolor en la parte inferior del abdomen o a veces en la zona lumbar. A medida que se acerca el parto, la frecuencia, duración e intensidad de las contracciones aumenta.
Estas contracciones son distintas de las contracciones de Braxton-Hicks o falsos dolores de parto que la mujer suele sentir en el último trimestre del embarazo. Éstas no suelen ser dolorosas y se producen a intervalos irregulares. Sólo al final del embarazo pueden resultar molestas para la futura madre. Su objeto es preparar al útero para el parto.
Para saber si se está ante un parto verdadero o falso, se recomienda cronometrar las contracciones. Si éstas aparecen a intervalos regulares, cada 5 minutos o menos, si duran entre 30 y 70 segundos y no desaparecen cuando la mujer se mueve, entonces es que ha comenzado la fase de latencia o borramiento del cuello. Es el momento de acudir al hospital.
Cuando se está ante un falso parto, las contracciones son de carácter leve, se producen a intervalos irregulares y pasan más de 5 minutos sin que se repitan. Además, suelen desaparecer cuando la mujer se mueve o descansa. Por eso, ante estas señales es conveniente relajarse y buscar una distracción, ya que el parto aún no se ha iniciado.