Empezaré el post diciendo que para la alimentación de tu bebé, es fundamental seguir los consejos de su pediatra, que es el que mejor sabrá cómo alimentarle durante sus primeros meses, etapa crucial para su desarrollo; y cómo le iremos introduciendo en nuestra rica y variada dieta mediterránea.
En sus primeras 25 semanas de vida cualquier madre sabe o debería saber que la leche materna es fundamental e imprescindible para cubrir sus necesidades alimenticias de manera exclusiva.
Podríamos seguir con la leche materna hasta el primer año, pero parece preferible que a partir del sexto mes vayamos introduciendo diferentes alimentos gradualmente, que complementarán las proteínas de la leche materna. Esta introducción, como todo, dependerá de cada bebé y no hay un manual para todos, pero podemos dar unos consejos generales:
– No hay que forzar al niño al nuevo alimento. Necesita un tiempo de adaptación a los nuevos sabores.
– De un alimento a otro, dejaremos pasar una o dos semanas.
– Importante: no hay que echar sal a ningún alimento durante los primeros 12 meses.
Este primer año es fundamental para prevenir futuros posibles problemas como la obesidad, la hipertensión o la alergia. Cuanto antes empecemos la creación de hábitos de la dieta mediterránea en nuestro bebé, mejor.
Prácticamente en el primer año, el bebé debe haberse introducido en todos los alimentos de nuestra rica «carta mediterránea».
Si, es muy importante seguir al pie de la letra las indicaciones del pediatra para la alimentación del bebé y no hacer caso de mucha gente que quiere hacer probar al bebé ciertas cosas que entran dentro de los alimentos prohibidos hasta por lo menos pasado el año de vida…