Con este calor (que ya era hora de que llegase) lo que más apetece es ir a la piscina y refrescarse. Los que más disfrutan son los pequeños de la casa y por eso hay que dejar que se diviertan siempre tomando una serie de precauciones.
Los siguientes consejos pueden servir tanto para la piscina como para la playa:
- Utiliza una buena protección para la piel de tu hijo, factor 50 pediátrico. Lo mejor es ponérsela antes de salir de casa ya que la crema empieza a hacer efecto real a partir de 20 minutos.
- No olvides llevar una gorra para protegerles del sol.
- Lleva agua para hidratarlos a menudo e incluso algo de comida.
- No es necesario cubrirlos con camiseta, la piel necesita curtirse poco a poco. Pero tienes que estar atento y echarles crema cada cierto tiempo.
- Todos estos consejos no serían efectivos si, sobre todo, no vigilamos los horarios de exposición al sol de nuestros hijos. Entre la 13 y las 17 el sol es muy dañino, procura evitar esas horas y aprovecha para comer y dormir una siesta.
- Si tienen ratos largos de juegos fuera del agua procura que sean a la sombra, una sombrilla o simplemente un árbol nos servirán como lugar de juegos.
Cuantos más pequeños sean tus hijos, menos horas de piscina y playa y más juegos a la sombra. Pero en ningún caso playa o piscina y bebés son incompatibles. ¡Disfrutad del verano en compañía de vuestros hijos!